Artículos

Lo voy a decir así: os podéis ir a la mierda

Os podeis ir a la mierda2

Sabéis que yo soy muy de escribir despacito y emotivo. De querer tirarme a por el lado tierno de las cosas y buscar, a veces, la lágrima. De mayor quiero ser sabia. Y quería escribir así sobre ese sentimiento que, creo, a todos nos toca procesar alguna vez: esa sensación de decepción con el género humano.

Ya sabéis: todos –creo- tenemos algunas personas a nuestro alrededor que no nos aportan, realmente, nada positivo. Que son como ese lado oscuro de la fuerza que siempre anda dando por el saco, pero sin espadas molonas. Así que me planteé hacer un escrito pausado, meditado, invitando a la reflexión… Pero luego he pensado “¡BAH! A la mierda. Vamos a echar bilis.”

Los que hace tiempo que no formáis parte de mi vida pero seguís ahí, orbitando, esperando el momento de verme tropezar. Os podéis ir a la mierda.

Los que se inventan excusas porque no tienen valor para decir las cosas a la cara. Os podéis ir a la mierda.

Los que estáis deseando que os cuente mis ideas para decirme lo malas que son. Os podéis ir a la mierda.

Los que nunca me han dado ánimos. Os podéis ir a la mierda.

Los que pensáis que podéis EXIGIRME que trabaje gratis para vosotros y os ofendéis cuando veis que no lo hago. Os podéis ir a la mierda. En taxi.

Los que no tenéis ni idea de quién soy, ni de mi contexto, ni de mi historia, pero sabéis exactamente qué es lo que hago mal y cómo debería hacerlo. Os podéis ir a la mierda.

Los que sois como los anteriores pero, en vez de decírmelo a mí, se lo decís a los demás, sólo por destruir, por el placer de intentar que alguien crea que valéis más que yo. Que valéis, en realidad, más que nadie. Os podéis ir a la mierda. Por mí y por todos mis compañeros.

Los que os enfadáis porque, simplemente, mis actos no giran alrededor de vuestro beneplácito. Os podéis ir a la mierda.

Los que estáis deseando verme fracasar. Os podéis ir a la mierda.

Los que habéis despreciado o atacado a alguien de mi familia o, PEOR, los que habéis utilizado el desprecio y el ataque a mi familia como medio para intentar herirme o humillarme. Os podéis ir a la mierda los primeros.

Los que no sabéis defender lo propio si no es atacando lo ajeno. Os podéis ir a la mierda.

Los que vivís en el insulto, en el desprecio, en el rencor absoluto al mundo y queréis que los demás seamos como vosotros. Os podéis ir a la mierda.

Los que sois grises y oscuros y os molesta la gente de colores brillantes, porque no hacen sino evidenciar lo grises y oscuros que sois. Os podéis ir a la mierda.

Los demás: los que sonreís, los que ilumináis, los que abrazáis, los que os gustan los gatos, los que sabéis jugar a “piedra, papel, tijera, lagarto, spock”, los que me conocéis de verdad –y me queréis a pesar de ello-, los que me miráis a los ojos, los que queréis, los que disfrutáis, los que sois conmigo y sin mí. Cariño, tú. Quedaos, por favor. La vida es mejor con vosotros. La vida SOIS vosotros.

Y los que os podéis ir a la mierda, una primera indicación: ¿veis dónde está mi vida? Pues la mierda está justo en la otra dirección.

Gracias.

______

Original para Facebook. 26/05/2016

¡Gracias por compartir!
FacebookTwitterGoogle+

Comentarios